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A 450 millas de la meta volante de Nueva Zelanda, el “Telefónica azul” se ha acercado 20 millas al liderato

A 450 millas de la meta volante de Nueva Zelanda, el “Telefónica azul” se ha acercado 20 millas al liderato

Hoy es el día 17 a bordo del “Telefónica azul” y le resto de la flota de la Vuelta al Mundo. Ha recorrido ya 4.690 millas (8.686 kilómetros) desde que salieron de Qingdao (China), dejando atrás el ecuador, los doldrums y las paradisíacas islas Fiyi y la diferencia entre el barco español y el líder es de tan solo 29 millas

es decir un 0,6% de ventaja sobre las miles de millas recorridas. Además de estos datos que revelan la enorme igualdad que hay entre la flota, hay un dato significativo que desde el equipo español no se quiere que “caiga en saco roto”: salieron de China 19 horas más tarde que la flota y el líder en estos momentos le aventaja tan solo en dos horas.

Las ultimas 24 horas han sido muy fructíferas para el “Telefónica azul” y desde el barco, su patrón Íker Martínez, transmitía ese sentimiento de poder rematar la remontada que por muy poco no se pudo finalizar antes de las islas Fiyi “ya son 16 días a bordo, se han pasado volando. Estamos ya muy cerquita de Nueva Zelanda, la primera de las puertas puntuables de esta etapa y estamos todos los barcos en una distancia ridícula, tres horas del primero al último. Mira que hemos pasado historietas a bordo y al final siempre va la cosa de poquito entre el que gana y los demás”

El campeón olímpico destaca que en las próximas 36 horas tiene una nueva oportunidad para cazar a la cabeza de la flota “en estas 450 millas que nos quedan puede pasar de todo, pero ahora mismo estamos cuartos, un puesto que no nos gusta demasiado. La verdad es que aunque hemos tenido una recuperada impresionante, no hemos conseguido ponernos delante de los tres barcos de cabeza, en alguna ocasión hemos estado en sotavento, en un lugar más cercano a la meta, pero ellos siempre estaban en el lado favorecido. Ahora tenemos la oportunidad de intentarlo otra vez antes de la puerta”.

Por su parte su compañero de equipo, el estratega y analista de datos Simon Fisher destacaba tres cosas. La primera que los spinnakers han vuelto de nuevo a cubierta “Han pasado 24 horas más y el mar continúa en calma y el viento moderado. Como esperábamos el viento se ha disipado y por primera vez durante esta etapa y fuera de la bahía de Qingdao, hemos izado el spinnaker otra vez”

La segunda fue el análisis del barco español por estar más al Oeste que el resto de la flota “tácticamente hemos sufrido un poco durante la noche ya que estamos un poco más hacia el Oeste y con menos viento, lo que ha sido un poco frustrante. A pesar de ello, seguimos esperando nuestro turno y podemos estar muy agradecidos de estar dentro de la flota después de nuestra salida tardía hace dos semanas”

Y la tercera fue la esperanza a bordo de internar, en las 450 millas que restan hasta la latitud 36º Sur (meta volante), de recuperar eses menos de 30 millas de ventaja que tiene la cabeza de la regata “todavía hay muchas millas por delante y no tengo ninguna duda de que tendremos más oportunidades de alcanzar a los líderes. La sensación es que la primera meta volante está cada vez más cerca y queremos destacarnos en la flota…”

Sin olvidarnos que el “Telefónica azul” ha sido el vencedor de las dos últimas etapas, de la cuatro disputadas, su patrón Iker Martínez auguraba para las próximas horas un cambios de dirección de viento que obligará a los barcos a pasar de rumbos de popa a ceñidas “el viento cambia mucho y el paso de una borrasca muy potente más al Sur hace que sea así de inestable. Parece que rolará mucho y cambiaremos de ir de popa a navegar de ceñida. El navegante se estruja el cerebro en su mesa intentando conseguir una ruta mejor que la de los rivales, pero éstos a su vez nos marcan directamente para que no les pasemos: cambios de velas, movimientos de pesos, etc. Otro día más de navegación...”

Mucho calor a bordo
La alta temperatura que están soportando de nuevo a bordo del barco español, es otro de los temas que desde el “Telefónica azul” han hoy “¡Hace un calor de muerte! – exclamaba el guipuzcoano. “Sudamos mucho pero tenemos ya la mente puesta en el Sur. En pocos días empezará de nuevo a hacer frío y cuando esto ocurra, empezará la ruta hacia Cabo de Hornos, unos 10 días desde Nueva Zelanda en donde casi siempre hace muchísimo frío y viento fuerte”

Por su parte el estratega del “Telefónica azul” era mas conciso en su afirmación sobre las altas temperaturas que están sufriendo “en cubierta la temperatura está subiendo y hoy es, sin duda, el día más caluroso desde que empezamos. Especialmente con la falta de viento aparente soplando por la cubierta como resultado de nuestra navegación en popa!. Trimando (con el pedestal) rápido el spinnaker tu energía baja y tu botella de agua pronto se pone caliente y, francamente, no refresca nada.”

“Abajo tampoco se está mucho mejor. Hay que ir con cuidado cuando bajas ya que el carbono se ha puesto a una temperatura que fácilmente puede quemarte los pies. Si tienes suerte puedes darte un respiro con todos los ventiladores zumbando sin parar en las literas, aunque tengo la sensación que esta es la tarde más intranquila. Con suerte mi i-pod me entretendrá hasta que las temperaturas sean los suficiente buenas para poder dormir!”

Cabo de Hornos comienza a rondar sus mentes
Aún no han pasado la meta volante de Nueva Zelanda, pero el “Telefónica azul” ya se están preparando para la batalla sobre el Pacífico Sur tanto materialmente como mentalmente y todo desde un mismo bordo desde que partieron de Qingdao “¡Dentro de poco tenemos que empezar a preparar el barco para esas condiciones duras y tal vez cambiemos de amura”– comentaba Íker. “No lo hemos hecho prácticamente desde que salimos de China, ¡todo el recorrido a babor! Unas 5.000 millas de un lado”.

El campeón olímpico y patrón del “Telefónica azul” se despidió diciendo que “Seguimos navegando con el spi, viento ligero, nuestras condiciones...”