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La Cofradía de Portosín vuelve a denunciar el uso de dinamita para la pesca de la sardina

Armadores de artes menores escucharon detonaciones frente al faro de Corrubedo

Cuando la mayor parte de la flota del cerco de Portosín está amarrada para cumplir el paro establecido y así poder acceder a las ayudas de la anchoa, los ilegales han vuelto a hacer de las suyas. En las últimas semanas, embarcaciones que se dedican a la pesca artesanal en las proximidades del faro de Corrubedo escucharon detonaciones en el mar, provocadas por armadores que se dedican a la pesca de la sardina. La Cofradía de Portosín ha puesto el grito en el cielo y se dirigió a la Consellería do Mar para que ponga coto a una actividad ilegal que provoca importantes daños al resto de la flota. El patrón mayor, Eduardo Carreño, señaló que existe un gran malestar entre los armadores de la localidad por las noticias que están recibiendo en los últimos días. Y no es para menos. El caladero que tanto han mimado desde hace años, el que comprende desde la zona de Corrubedo hasta Fisterra, «está a ser asaltado por barcos que usan explosivos para coller sardiña», dijo.

Las detonaciones fueron escuchadas, según el dirigente de la entidad, por barcos de artes menores que en las últimas semanas faenaban por la zona. «Tivemos chamadas na confraría de armadores que dicían haber escoitado deflagracións no mar. Estes mariñeiros non queren denunciar publicamente porque teñen medo a represalias e por iso fan as súas queixas a través de nós», apuntó Carreño. El responsable de la entidad marinera indicó que esta situación se da casi todos los años antes del verano, cuando comienza la temporada de la sardina. «Hai algúns barcos que queren facer a tempada nuns días e usan dinamita para pescar esta especie nas nosas costas», dijo el patrón mayor. En este sentido, insistió en que a pesar de las campañas y las denuncias que llevan realizando desde hace años por erradicar esta actividad ilegal, «aínda hai xente que bota dinamita no mar», subrayó el dirigente del pósito de Portosín.

Aunque no tienen nombres, desde la cofradía apuntan que, según la información de la que disponen, los barcos que utilizaron explosivos en la zona de Corrubedo son varios cerqueros de la ría de Vigo y uno de Camariñas. Estos hábitos, según comentó Eduardo Carreño, estuvieron provocando en años anteriores enfrentamientos en la flota que no favorecieron a nadie.