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Puerto Deportivo Sanlucar del Guadiana

Puerto Deportivo Sanlucar del Guadiana

Situación 

37º28.2'N
007º28.5'W

Agencia Pública de Puertos de Andalucía

Embarcadero situado a 20 millas río Guadiana arriba de Ayamonte. Zona de servicio
Total: 9.823,5 m 2
Agua: 7.479,7 m 2
Tierra: 2.343,8 m 2
Calado en bocana: 2.00 m (B.M.V.E.)
Marea: 3,44 m

El río Guadiana, con una cuenca de casi 70.000 km2 y longitud de 818 kilómetros, de los que la mayoría recorre por suelo español y parte por Portugal. Que nace en las bellísimas Lagunas de Ruidera aunque la idea más difundida es que lo hace en la altiplanicie de los Campos de Montiel en la provincia de Ciudad Real. De nombre con origen árabe, wadi-anas, es navegable en sus últimas millas antes de tributar al océano Atlántico.

Desde el poblado portugués de Pomarao, baja hasta el océano uniendo las orillas portuguesas y españolas. A su paso recala en Sanlúcar de Guadiana y Alcoutim, vecinas poblaciones, cada una con su castillo y que es un placer visitar navegando.
Durante el año se celebran varias manifestaciones deportivas destacando el Ascenso y Descenso a Vela que tiene lugar en agosto y la regata internacional de Piragüismo en Julio.
La llegada por mar está señalizada, balizada, y lo primero que se percibe, a la izquierda es la ciudad de Vila Real de Santo Antonio, su moderna urbanización y su Marina, a la derecha se puede observar el poblado de Canela y la entrada del estero de la Canela.

Continuando río arriba aparece Montegordo y su bien conservado castillo, del lado español se aprecia Ayamonte, la bocana de entrada a su puerto deportivo.
Más adelante se observa en la parte alta de la ciudad la iglesia del Salvador.
Poco más adelante el puente, esbelto, permite el paso de embarcaciones hasta 21 metros de altura, lo que facilita a veleros de cierto porte poder avanzar.
Al pasar bajo él, cuando el viento sopla, se oyen los sonidos que el viento produce con los gruesos cables que lo sustentan.
Una vez pasado el puente se tiene la auténtica sensación de haber abandonado la mar y aunque su amplitud es considerable, la flora especialmente, recuerda al Mediterráneo.
Ascendiendo se pasa por Almada de Ouro. Desde allí una carretera discurre paralelamente al río, muy cerca de la orilla.
Más adelante se llega al poblado portugués de Foz de Odelite en el que se encuentra un embarcadero y algunas boyas para el fondeo de embarcaciones. Más adelante se encuentran otros dos, Guerreros do Río, primero y Laranjeiras después.

Cada vez la sensación se hace más extraña, el olor de la jara, o de algún naranjal hace al navegante sentir una extraña sensación sobre todo cuando a pesar de la amplitud del río el horizonte es verde o marrón según sea la época del año.

Finalmente se llega a un punto crucial. Se está a una 20 millas náuticas de la desembocadura.
A la izquierda Alcoutim, con su bellísimo castillo incrustado en la población, a la derecha Sanlúcar de Guadiana, también con su castillo que desde una considerable altura parece vigilar todo.

Ambas poblaciones tienen su embarcadero y su servicio para llevar visitantes de una orilla a la otra.
Normalmente 40 ó 50 embarcaciones se encuentran amarradas o fondeadas lo que provoca una sensación única.

A partir de aquí el río se estrecha, aunque continua ofreciendo mucha seguridad al navegante, que de cualquier forma jamás debe confiarse.
De repente como imagen fantasmagórica aparece el Puerto de la Laja, antigua construcción en la que se clasificaba el mineral que se obtenía de las minas para cargarlo en los mercantes que subían río arriba para su recogida.
Más adelante se llega a la presa del embalse del río Chanza e inmediatamente después se encuentra la población de Pomarao, a partir de aquí ambas orillas pertenecen a Portugal.

La llegada a Pomarao hay que hacerla con mucha precaución cuando se navega.
Por la orilla española, la más cercana a la presa se encuentran en el fondo piedras de gran tamaño, mientras que en la orilla portuguesa es arena y piedras pequeñas. Es necesario la máxima precaución cuando la marea no es muy alta.

Desde Pomarao el río continua siendo navegable hasta la hermosa población de Mértola, sin embargo no es aconsejable subir navegando si no se conocen los obstáculos que existen por el camino.
El río se estrecha y las orillas pasan a ser más altas.