Muchos detalles al descubierto en la primera jornada de la regata preliminar Louis Vuitton

La mar de Barcelona ofreció unas condiciones excepcionales para la primera jornada de la Louis Vuitton Preliminary Regatta. Un viento del SW de entre 12 y 16 nudos, racheado y a veces irregular, condiciones cde la primera hora de la tarde, trayendo consigo un estado del mar moderado con olas de poco más de medio metro de altura, haciendo que las regatas fueran más que interesantes y ofreciendo un brillante comienzo para lo que será un fantástico verano de regatas de primera clase en Barcelona.
El equipo suizo Alinghi Red Bull Racing, que proseguía con su brillante recuperación de la avería sufrida 48 horas antes, se enfrentó al Orient Express Racing Team francés en la primera manga.
La regata se decantó de forma decisiva a favor de los suizos, timoneados por Maxime Bachelin y Arnaud Psarofaghis, que demostraron un excelente manejo del barco, respaldado por una impresionante velocidad pura, y aprovecharon los errores de cronometraje de los franceses en la presalida para establecer una temprana ventaja que nunca abandonaron.
Bachelin, que navegaba a babor, se mostró encantado con su primera victoria:
«Es increíble empezar con este tipo de condiciones, había más de 15 nudos durante la regata y al final estábamos compitiendo contra los demás, así que no podíamos esperar nada mejor, y sí, empezar con una victoria siempre es bueno».
Joan Vila, Meteorólogo y Director de Pruebas de Alinghi Red Bull Racing, se refirió a la notable recuperación del equipo tras la rotura del mástil el martes diciendo:
«Obviamente, nunca queremos romper un mástil, pero fue un buen ejercicio para poner a todo el mundo en la misma página. Ha unido más al equipo y nos ha dado una motivación extra para rendir bien en las regatas. Por ahora, estamos muy contentos tanto con la jornada de entrenamientos de ayer como con la de hoy».
El duelo más esperado del día fue la segunda regata, en la que los defensores de la America's Cup, Emirates Team New Zealand, se enfrentaron a sus cofinalistas del AC36, los italianos Luna Rossa Prada Pirelli.
La lucha estuvo reñida en los tensos intercambios previos a la salida, pero el desafío italiano se esfumó cuando un problema electrónico a bordo apagó su barco durante 20 segundos, lo que les dejó sin foils y les obligó a abandonar la regata. Sin embargo, no cabe duda de que se trata de una rivalidad que se prolongará durante las próximas semanas de regata.
Peter Burling, patrón de Emirates Team New Zealand, se mostró satisfecho con la victoria:
«Hemos tenido unos entrenamientos muy buenos contra Luna Rossa y se perfilaba como una regata muy buena, así que fue una verdadera lástima que tuvieran problemas con el barco y no pudieran continuar, porque sentíamos que habíamos conseguido una buena ventaja a mitad de la primera empopada y teníamos ganas de hacer una buena regata».
Por su parte, Jimmy Spithill, caña de Luna Rossa, afirmó que aún no se habían analizado los diagnósticos del problema contra Emirates Team New Zealand:
«Fue una pena porque teníamos una buena regata mano a mano con los kiwis y parecía que iba a ser buena. Nos decepcionó no poder disputar esa regata, pero en muchos sentidos preferimos que este tipo de cosas ocurran ahora y no cuando realmente cuentan».
A continuación, el NYYC American Magic, que había sufrido una caída en picado en los entrenamientos del día anterior, se enfrentaba al INEOS Britannia, que se mostraba entusiasmado con el día y las regatas que se avecinaban.
Tras una salida fulgurante de Ainslie y un primer cruce brillante de los británicos por el lado derecho del campo de regatas, los estadounidenses remontaron inmediatamente después de encontrar más presión y un gran role de viento para liderar en la baliza de barlovento. Aunque en la primera empopada se produjeron dos cruces muy ajustados, el equipo estadounidense mantuvo su ventaja en la puerta de sotavento y ya no volvió a verse superado, logrando la victoria por un margen de 29 segundos.
Tom Slingsby, timonel del NYYC American Magic, se mostró satisfecho con el desarrollo de la regata inaugural contra el INEOS Britannia:
«Ha sido una regata muy ajustada en todo momento. No parecía haber mucha diferencia en cuanto a velocidad del barco. Una vez que nos pusimos por delante, fuimos capaces de proteger la derecha y daba la sensación de que íbamos ganando poco a poco».
«Hemos ganado nuestra primera regata y, aunque queda mucho camino por recorrer, es bueno estrenarse, ya que no quieres estar esperando un par de días para conseguir tu primera victoria. Así que estamos en marcha y nos esperan grandes citas en los próximos días».
Sir Ben Ainslie, patrón y CEO del INEOS Britannia, contextualizó la actuación del equipo británico diciendo:
«Estratégicamente no defendimos la derecha lo suficiente. Teníamos la sensación de estar en buena forma a mitad de la primera ceñida. Queríamos el lado derecho, y lo conseguimos, pero luego se convirtió en un difícil equilibrio entre si teníamos suficiente ventaja para ir a la línea de lay? ¿O queríamos machacar y tratar de defender ese lado derecho? Los estadounidenses estaban bastante cerca de nosotros e hicieron un buen trabajo para dificultar esa decisión. Se pusieron a nuestra derecha y lo pagaron».
«Con esta brisa Garbi de unos 200 grados, el campo de regatas está muy dominado por el lado derecho, pero hay algunos cambios y líneas de presión, y sólo se trata de intentar mantenerse en esas líneas de presión y conseguir el sesgo de puerta correcto en la parte alta del campo».
La última regata del día fue un tanto accidentada desde el principio, ya que Orient Express Racing Team se cayó de sus foils antes de la presalida, fue penalizado por varias infracciones y permitió a Luna Rossa Prada Pirelli salir sin oposición y establecer una ventaja inmediata. Los italianos ampliaron su ventaja de forma constante, mostrando un magnífico manejo del barco y una gran velocidad para registrar la mayor victoria del día, de un minuto y 33 segundos.
Para Quentin Delapierre, patrón del Orient Express Racing Team, fue otro día de mucho aprendizaje, pero con muchos aspectos positivos:
«Todavía es un periodo de aprendizaje y los errores están permitidos. Sólo tenemos que aprender la lección e intentar seguir adelante con todo el equipo.Creo que hay muchas cosas positivas, el barco parece rápido y tiene un gran potencial, pero lo cierto es que tuvimos problemas en la salida y en las presalidas. Creo que hemos tenido algunos problemas con la herramienta táctica, pero sinceramente eso es más culpa nuestra. Tenemos que trabajar en ello, simplificarlo todo y hacer las cosas correctas en el momento adecuado».