El Estrella Damm Sailing Team defiende liderato rumbo a casa

El Estrella Damm ya está camino a su ciudad, Barcelona. A las doce en punto del mediodía en la Bahía de los Ángeles de Niza se escuchaba el pistoletazo de salida de la segunda etapa de la Istanbul Europa Race, desde la ciudad francesa hasta Barcelona, con un viento de componente Sur de unos ocho nudos de intensidad. El Estrella Damm intentará realizar un buen papel llegando a casa, tras haber vencido en la primera etapa de Estambul a Niza y liderar por tanto la clasificación de la regata de vuelta a Europa.

Para el patrón barcelonés Guillermo Altadill, esta es una etapa muy especial, con muchos motivos para intentar lograr otro buen resultado: “Ahora volvemos a casa, donde encontraremos a nuestras familias y a toda la gente que nos apoya: nuestro patrocinador y el Ayuntamiento de Barcelona que es una parte importante de este proyecto. Tenemos la presión doble de llegar a Barcelona bien por esto y porque hemos ganado la primera etapa y eso implica la presión añadida de continuar en esta línea”, comentaba Altadill antes de salir de puerto. “Pero no va a ser fácil, porque todos los demás también están aquí para intentar ganar”, advertía el barcelonés.

Por su parte, Pachi Rivero aseguraba: “Tenemos muchas ganas de llegar a Barcelona. Para nosotros sería muy bonito dedicarle un buen resultado a nuestro patrocinador, al que le debemos todo, y si es en Barcelona, de donde es Estrella Damm, mejor que mejor”, decía el patrón cántabro antes de la salida.

El recorrido elegido por la organización lleva a la flota a un paso obligatorio por la isla de Menorca. “Eso limita las opciones durante el recorrido al poner un desmarque, y lo alarga un poco”, explicaba Rivero. “Será una etapa interesante y habrá que trabajar duro”, concluía el patrón afincado en Mallorca.

Pese al conocimiento local de la ruta, el equipo no se confía y prevé un final ajustado: “Conocemos el recorrido Niza-Menorca-Barcelona de regatas de otras clases y supongo que será una pequeña ventaja, pero al final estoy seguro que cuando lleguemos a Barcelona las diferencias serán mínimas entre todos los barcos (…) ya que las opciones tácticas no podrán ser muy radicales, porque es bastante línea recta”, apuntaba Altadill.

Con esta opción de recorrido, en lugar de la ruta directa Niza-Barcelona, se añade algo más de distancia a la etapa, por lo que se espera la llegada de la flota durante la mañana del viernes 11. “Hacemos unas cuantas millas más”, explicaba Altadill, “pero quizá incluso los ángulos al llegar a Barcelona serán mejores, o sea que iremos más rápido. La diferencia será de doce a quince horas más de regata, pero la hará más interesante. Para Altadill, la etapa será “cuestión de velocidad”, pero habrá “dos puntos clave: rodear Menorca sin quedarse desventado y al llegar cerca de la costa de Barcelona, donde hay dos vientos opuestos, que son el de gradiente (el normal) y el térmico”, explicaba el barcelonés. “Ahí puede ser tierra de nadie y puede reagruparse de nuevo la flota”, advertía.

El Estrella Damm salió como casi toda la flota por el lado del barco de Comité. El barco español viró pronto y era el único amurado a babor, aunque consiguió más presión de viento y en las primeras millas del recorrido estaba tercero tras el Foncia y el DCNS.

Nueva protesta desestimada

La protesta interpuesta por el DCNS de Marc Thiercelin contra el Estrella Damm a su llegada a Niza ayer por la tarde ha sido desestimada esta mañana por el Jurado Internacional, como ya lo fuera la anterior presentada por el Paprec Virbac de Jean-Pier Dick. Ambas protestas se referían a una situación de los tres barcos en la salida, pero se demostró que el Estrella Damm no había sido el barco que infringió ninguna norma.