“Telefónica negro” llegaba esta mañana a Rio de Janeiro

“Para hacer el trabajo tuvimos que bajar la mayor y navegar con tres rizos durante unas siete horas. Fue una situación en la que tuvimos que mantener los nervios a raya y ser pacientes: estábamos navegando lentos, pero no teníamos otra opción”, comentaba desde la embarcación su capitán Bouwe Bekking. Se trataba de una deslaminación en la parte inferior de la mayor.

Siendo el barco situado más al Sur de la flota, a bordo del “Telefónica azul” están encantados con su posición ya que, como decía Bekking, “hicimos grandes progresos, una agradable sorpresa ”.

Cuando el viento bajó un poco, Jordi Calafat, que es el velero a bordo, se puso manos a la obra. Un sikaflex a prueba de balas con una gran capacidad adherente fue lo que emplearon. “La situación se convirtió en un trabajo más de ‘construcción’ que de ‘velería,’” -describía Bekking- “así que David entró en acción”.

Con el trabajo ya hecho justo antes de la puesta de sol, el “Telefónica azul continuaba navegando con un rizo en la mayor, para ver si así la “cura” se cierra mejor. David Vera, uno de las voces cantantes en el trabajo realizado sobre la mayor y que acabó cubierto de sikaflex decía: “Hemos reparado la mayor durante toda la tarde y no hemos perdido mucho con respecto a los demás, al contrario; de hecho vamos ganando millas en los reportes de posición. Nos ha costado mucho trabajo poner la mayor bien y nos ha quitado horas de sueño, pero ahora está lista”.

Por su parte, Bekking advertía que esta etapa será aún más larga de lo que muchos habían pensado: “Ahora navegamos por la parte superior del sistema de altas presiones y después tendremos que virar… “¡Quien haya dicho que íbamos a llegar a Río de Janeiro en 34 días estaba muy equivocado! Por lo menos, tenemos suficiente comida a bordo del ‘Telefónica azul’”.

MEDIA HORA PARA VESTIRSE
El tremendo cambio en las condiciones meteorológicas ha dado paso a los trajes de supervivencia, botas, guantes y todo tipo de ropa que se les pueda ocurrir para evitar el frío. Todo ello se traduce en que los tripulantes necesitan media hora sólo para vestirse, como explicaba el trimmer Xabi Fernández: “Ayer empezó a hacer frío. Yo personalmente, y otros en el barco también, ya hemos cogido el traje de supervivencia, que es un traje seco entero”.

A lo que el campeón olímpico añadía: “Siempre nos hace falta una media hora para vestirnos más o menos y eso que, por ahora, llevamos dos pantalones, dos capas abajo y dos arriba. Y a medida que vayamos más al Sur y vaya haciendo más frío, llevaremos puestas más capas de ropa… Podemos llegar a utilizar tres o cuatro capas, tanto en la parte de abajo como arriba”.

EL TELEFÓNICA NEGRO YA ESTÁ EN RIO
El barco español “Telefónica negro” llegaba hoy pasadas las 09:30 hora española a Marina de Gloria, en Río de Janeiro (Brasil), puerto final de la quinta etapa de la Vuelta al Mundo y que acogerá además la cuarta prueba costera de esta edición y la salida de la sexta etapa, los días cuatro y 11 de abril respectivamente.

23 días han pasado desde que, el pasado 10 de febrero, el “Telefónica negro” partía de Singapur hacia Brasil. El barco que patronea el campeón olímpico Fernando Echávarri está ahora amarrado en el puerto de la capital carioca, donde comenzarán ahora los trabajos de reparación.

Echávarri y su equipo esperan “en principio tener todos los trabajos listos en aproximadamente dos semanas”, como comentaba el patrón del “Telefónica negro”, y a partir de ahí poder concentrarse ya en la regata costera del día cuatro de abril. “Creo que tendremos unos días previos de entrenamientos para comprobar que el barco esté en perfecto estado y probar las velas nuevas que tenemos”, adelantaba.

Todos estos días han servido además para que el equipo haya podido trabajar en diferentes aspectos para mejorar de cara a las próximas etapas: “Estos últimos días se ha estado trabajando especialmente en acabar de definir lo que tendremos, pero puedo adelantar que tenemos bastantes velas nuevas de cara a las próximas etapas”.

Una labor de la que Echávarri destacaba especialmente la importancia del trabajo en equipo: “Para poder llegar a estas conclusiones es muy importante la labor de equipo que realizamos ambas tripulaciones, ‘Telefónica azul’ y ‘Telefónica negro’. Después de cada etapa comparamos los datos de los dos barcos y con ellos sacamos conclusiones válidas para ambos equipos. No siempre nos encontramos en la situación de probar los dos barcos en regata así que usamos todos los datos que se van acumulando en los ordenadores y, una vez en tierra, se analizan para saber en cada condición qué vela y qué trimado iba mejor… Siempre ayudan los datos y se comparan los dos barcos”.

Con varios miembros del equipo de tierra ya en Rio para coordinar la llegada del “Telefónica negro”, pronto llegará el turno a la tripulación, como confirmaba Echávarri: “De entrada algunos miembros de la tripulación irán a Rio y cuando el barco esté listo llegará el resto para prepararlo y tenerlo en el agua lo antes posible. A partir de ahí, todo serán pruebas y chequeos para ver que todo está en orden”.